Columna publicada en el Diario de Atacama, el lunes 09 de octubre de 2017

El protagonismo ciudadano en la toma de decisiones de interés público, sin lugar a dudas, es uno de los elementos más relevantes y potentes de la democracia actual. Como representante del Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, creo que el presente no es comprensible sin ese nuevo protagonismo, el cual posiciona en el debate público, términos tan relevantes como el control social, la recuperación de la soberanía y la democracia de ejercicio.

Con participación ciudadana, podemos entender al necesario involucramiento activo de los ciudadanos y las ciudadanas en aquellos procesos de toma de decisiones públicas que tienen repercusión en sus vidas.  Este rol recibió reconocimiento legal en el presente Gobierno con la entrada en vigencia de la Ley sobre Asociaciones y Participación Ciudadana en la Gestión Pública, que incorporó en nuestra legislación la afirmación de que el Estado reconoce a las personas el derecho de participar en sus políticas, planes, programas y acciones.

Ya lo establecía en su Programa de Gobierno la Presidenta Michelle Bachelet, al consignar que «aspiramos a un Estado moderno para Chile que promueva el fortalecimiento de la democracia y facilite el diálogo y la participación; un Estado que garantice el ejercicio de los derechos políticos, económicos, sociales y culturales de la ciudadanía y que impulse políticas públicas para disminuir las desigualdades, combatir los abusos y contribuir a una distribución del ingreso más igualitaria».

Es así como vivimos históricos procesos como la etapa participativa del proceso constituyente, en la que, en una experiencia inédita, participaron más de 200 mil chilenos y chilenas, mujeres y hombres de todas las condiciones sociales, formaciones e intereses, que entregaron su opinión y debatieron acerca del Chile que sueñan y de los contenidos que debiera tener una nueva Constitución Política.

Mi llamado en esta oportunidad, es a que usted, vecino y vecina de Atacama pueda participar de las próximas elecciones presidenciales, parlamentarias y de consejeros regionales del 19 de noviembre. Participar activamente es fundamental para decidir sobre qué queremos para el futuro de Chile y la región. Si no nos interesamos y decidimos, otros lo harán, por tanto ejerzamos este derecho que tanto esfuerzo costó ganar a miles de chilenos y chilenas.